Adiós a Sánchez Vázquez





Desde el año pasado, tengo la extraña sensación de que una gran generación de pensadores y artistas se han comenzado a ir de este mundo. La cuestión es, sobretodo, que pareciese que se van en grupo, dejando un espacio muy grande difícil de llenar.




Siendo honesto, en realidad es poco lo que tengo que decir sobre el filósofo español. Confieso que no soy seguidor de la filosofía de Sánchez Vázquez, pero si algo he de admitir, es que hizo cosas muy importantes en la cultura. Fue un pensador cabal, que se entregó al marxismo tratando de imprimirle una renovación necesaria. Su filosofía pretendió, por si fuera poco lo anterior, incluir en el marxismo una veta estética, esto es, una reflexión en torno al arte como parte del devenir histórico-material. Pensar el arte, desde el materialismo es, sin duda, una audacia que exige la agudeza y buen genio de quien lo postula.




Alcancé, a pesar de su edad y de la mía, a escucharlo de viva voz en su casa, la Facultad de Filosofía y Letras y, desde entonces, he sabido que con él se acababa la riqueza de los maestros exiliados que llegaron a nutrir nuestras ideas y nuestra cultura. Es, por tanto, verdaderamente una pena que el penúltimo pensador exiliado haya partido ya definitivamente de este mundo, para dejar de ser exiliado y habitar en la constelación de los grandes pensadores.




Que descanse en paz, Dr. Adolfo Sánchez Vázquez.

Comentarios

Adolfo Chattaj ha dicho que…
Este comentario ha sido eliminado por el autor.

Entradas populares